viernes, 27 de marzo de 2015

+ Pintar Fotos +

Siguiendo con los autores que vi en ArtMadrid15, hablábamos el último día de enfocar la técnica pictórica de una nueva manera. Por ejemplo, también podría ser trabajando sobre una fotografía. Ya sé que es algo poco ortodoxo. Incluso alguno de vosotros en el taller lo habéis probado a escondidas, como pidiendo perdón por no haber realizado el encaje por con vuestro propio esfuerzo. La metodología tradicional hace mucho tiempo que saltó por los aires y además, utilizar una foto de base no promete calidad artística si no se sabe resolver el reto posterior de la obra.

Rubén Martín de Lucas y Guim Tió Zarraluki utilizan instantáneas como punto de partida de sus cuadros. El primero imprime imágenes en blanco y negro sobre un lienzo (lo hará en alguna tienda especializada en este menester), y luego utiliza el acrílico y el collage para personalizar el motivo. Sus colores ácidos rompen con la imagen clásica del paisaje mientras que la foto que se aprecia debajo de la pintura le da estructura y solidez al conjunto. La linea, el gesto fresco, espontáneo y el empaste aportan una vibración nueva y enriquecedora al maridaje.


Zarraluki en cambio utiliza una técnica seca, las ceras, porque trabaja sobre papel couché, que es muy fino y el agua lo estropearía. Sorprendentemente, en la galería donde este autor exponía había un ipad reproduciendo un vídeo que permitía ver el trabajo a cámara rápida del autor desde el comienzo, sobre una foto de una revista de moda, hasta la conclusión de la obra. Allí podías comprobar cómo, en vez de respetar el motivo como Martín, simplemente conservaba alguno de los elementos de la foto (una oreja, un ojo, un resto de la nariz, tipografía) que quedaban tal cual o semicubiertos, mientras el resto se transformaba totalmente. Así sus rostros nacen inquietantes y misteriosos. Tienen un resto de fotografía pero van mucho más allá. De personas se volvieron personajes, arquetipos con un leve recuerdo de su existencia anterior.








- Semana 26 - Eva


- Semana 26 - Flor


- Semana 26 - Gloria


- Semana 26 - Isabel


- Semana 26 - Magdalena


- Semana 26 - Maike


- Semana 26 - Maria Antònia G.


- Semana 26 - Mercè A.


- Semana 26 - Mercedes L.


- Semana 26 - Nuria


- Semana 26 - Sebastiana


- Semana 26 - Victòria


- Semana 26 - Ángel


- Semana 26 - Cati


- Semana 26 - Elisabet C.


viernes, 20 de marzo de 2015

+ Temas de siempre, nuevos enfoques +

Visitando la feria de ArtMadrid 15 vemos cómo hay géneros en el arte que siguen presentes aunque pareció que la revolución moderna los había arrinconado, finalizado, como por ejemplo el paisaje. Y esto me recuerda aquel literato que divagaba con un aprendiz sobre un buen tema para una novela, y le proponía, como ejemplo: "un hombre ama a una mujer". Ante la obviedad de la propuesta respondía el erudito: "sí, el tema está repetido un millón de veces, lo importante es cómo se cuenta"…

Porque los paisajes impresionistas o románticos podemos encontrarlos en una feria de antigüedades, en una de arte moderno los artistas se esfuerzan para modificar los parámetros tradicionales. Y esto puede hacerse de diversas formas…

Carlos Morago nos presenta este óleo sobre papel, donde el soporte ya nos habla de ruptura. Sin embargo, el óleo está utilizado con la misma maestría de los clásicos, pero cambiando el enfoque: paredes blancas, lisas e inmensas, junto a unas oscuras aberturas del muro central nos transportan enseguida a un ensanche cualquiera de las ciudades en que vivimos. El boom constructivo de los años 60, rápido, barato y sin ninguna exigencia estética nos deja muchos paisajes de este calibre, reinterpretados por un ojo audaz para convertirlos en algo cargado de sensibilidad. 

Fausto Martín opta por cambiar de técnica para actualizar su mensaje. Y así un paisaje típico de tejados, al realizarlo utilizando el grafito sobre una tabla, renueva totalmente su sentido. Mezclando la nostalgia de las fotos en blanco y negro con la calidad de los grises hechos a mano crea un ambiente sereno, lleno de atmósfera.

Nuestros dos últimos autores utilizan el color para forjar su propia personalidad, pero tomando caminos opuestos. Juan Luque busca sólo el ambiente en este faro, óleo sobre tabla, en que la paleta de colores se ha reducido al mínimo para favorecer la sensación de espacio, con veladuras y transparencias. En cambio, Pablo Maseo emplea acrílico, material más en consonancia con el arte pop que su paisaje evoca. El colorido plano, puro, sin matiz, alude al mundo del cómic y la ilustración; una imagen genuinamente americana significa también esta forma de percibir la realidad, convertida en anuncio publicitario.







- Semana 25 - Carlos


- Semana 25 - Cati


- Semana 25 - Elisabet C.


- Semana 25 - Flor


- Semana 25 - Geni


- Semana 25 - Gloria


- Semana 25 - Maike


- Semana 25 - Maria Antònia B.


- Semana 25 - Mercedes L.


- Semana 25 - Tutes


- Semana 25 - Victòria


- Semana 25 - Ángel


- Semana 25 - Ángeles


viernes, 13 de marzo de 2015

+ ArtMadrid 15 +

Cada año aprovecho la excusa de ARCO para viajar a Madrid y ver a viejos amigos de la facultad. Igual que el año pasado, en vez de visitar esta feria nos decantamos por ArtMadrid, pues aunque es más reducida, está emplazada en la Galería de Cristal del Centro Cibeles, en el corazón de la ciudad y nos permitió ir a comer a un restaurante junto a Sol y tomar el café en la calle Huertas…

Siempre, en una muestra de este calibre, puedes contemplar obras de los más conocidos artistas junto a propuestas atrevidas y nuevos enfoques de temas clásicos. Ver pintura siempre estimula, da ideas y ganas de pintar.

Hoy empezaré destacando alguna obra de entre los pintores consagrados del panorama español. El óleo sobre lienzo de Barceló parece más una técnica mixta, con grandes empastes, representando una estatua africana negra con collares y cráneo de caimán. El elegante marco quiere contrastar con la rudeza del motivo y armonizar los blancos del reptil. También el marco del boceto de Miró le da categoría y valor a un sencillo dibujo sobre papel sepia realizado con frescura y seguridad. Chillida, tan esencial, en este gofrado sobre papel hecho a mano donde la luz es la que cuenta el objeto pues no hay nada más que la hendidura sobre el soporte.

De Manolo Valdés os adjunto un óleo sobre arpillera de gran tamaño (pecera) y un grabado + collage sobre papel; el color tan intenso y al mismo tiempo controlado, compensado, convierte sus obras en un placer para los ojos. Y acabamos con dos abstractos con enfoques complementarios, uno libre y juguetón, de Esteban Vicente y otro estructurado y lineal de Juan Uslé.









- Semana 24 - Bel


- Semana 24 - Cati


- Semana 24 - Elisabet C.


- Semana 24 - Eva


- Semana 24 - Flor