viernes, 21 de junio de 2013

+ Call Parade en Sao Paulo

Por las noticias que destaco en el blog ya os habréis dado cuenta de que, sin ser un entendido, disfruto contemplando el arte que sale a la calle. Poseer una obra artística en casa nos permite gozar de ella a diario, contemplarla relajadamente y descubrir detalles y secretos que a primera vista no habíamos percibido. En la calle todo es dinámico y efímero. Nada está quieto, todo se mueve y evoluciona, ese es su atractivo. Y cuando la creatividad del artista se hace presente de forma adecuada, sin vandalismos sino con profesionalidad, nuestra experiencia cotidiana en la ciudad se enriquece sobremanera.

¿Quién no ha utilizado alguna vez un teléfono público? En Europa cada vez se encuentran menos instalados en la calle pues el móvil es algo ya generalizado y el gamberrismo con este tipo de mobiliario lo ha hecho poco rentable. En otras latitudes sigue siendo un instrumento necesario, como sucede en Brasil. En Sao Paulo tienen una forma especial cuyo diseño se remonta a los años 70. En aquella época la arquitecta y Jefa de Ingeniería de la Compañía Telefónica de Brasil (CTB) era una mujer de origen chino llamada Chu Ming Silveira. Ella sabía que la mejor forma para una buena acústica interior es el huevo. Partiendo de esta idea elaboró un diseño en fibra de vidrio que resultó ser muy resistente, simple, cómodo y funcional. Hoy en día estas cabinas telefónicas se han convertido en una señal de identidad de la ciudad como lo es el color de los taxis en otras. Son conocidas como “orelhoes”, o grandes orejas en castellano.






El año pasado la compañía de teléfonos “Vivo” decidió emprender una interesante campaña de intervención sobre 100 cabinas, similar al trabajo que ya os mostramos de Lisboa sobre contenedores de cristal. El proyecto busca homenajear los 40 años de la instalación de estos originales receptores y permitir a un considerable número de artistas mostrar su creatividad en público. El resultado es muy atractivo y estéticamente estimulante. Después, cuando el público se introduce en las cabinas para utilizarlas, estos universos artificiales cobran vida y sentido pleno.

Podéis ver todas las obras en el siguiente enlace:







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