viernes, 28 de junio de 2013

+ Con la Musa a otra parte

Sabéis los que venís al taller que aquí tenemos nuestra propia Musa del arte que nos inspira. Está en el jardín como una reina y nos mira con el rabillo del ojo, sugiriendo líneas más sutiles o colores más armónicos. Desde su pedestal dirige las ofrendas para que la inspiración nos sea propicia. Sus manos, como las nuestras, trabajan con la tierra pero se dirigen al cielo, se ensucian con los pigmentos buscando la armonía, incansables pasan las horas pues con la experiencia viene la destreza y con ella la seguridad y el placer del buen hacer.

Sabéis los que venís al taller que a nuestra querida Musa le espantan los calores. En cuanto siente los sudores comienza a inquietarse. Queremos retenerla pero no podemos, la fuerza del mar es más fuerte. Así que como cada año nos vamos con ella hacia la orilla a refrescarnos. Aquí ya las líneas son rayas, las sombras, borrones. Los colores sucios se apoderan de los lienzos y la inspiración no llega ni aún revisando los libros de los grandes maestros. Hay que marcharse con la Musa a otra parte.

Sabéis los que venís al taller que nuestra Musa particular volverá en septiembre, cuando se sacie de luz y de sal. Aquí estaremos de nuevo con los ojos llenos de ideas y las manos frescas para contarlas. Hasta entonces os deseamos que no dejéis de trabajar porque si la Musa está junto al mar, allí es donde los dibujos saldrán con más frescura y acierto. Nos vemos de nuevo muy pronto, pues los buenos momentos son los que más deprisa se vuelven recuerdo, que los disfrutéis.




No hay comentarios:

Publicar un comentario