viernes, 25 de octubre de 2013

+ Ossario +

Alexandre Orion es un joven de 27 años oriundo de Sao Paulo y graduado en Artes. Se ha dedicado especialmente al campo del graffiti aunque en la actualidad trabaja como ilustrador para las principales publicaciones de Brasil. Le gusta moverse en los límites del arte, tanto a nivel conceptual como formal.

Una muestra de este gusto por lo fronterizo es el graffiti que realizó el año pasado en uno de los túneles de su ciudad natal. Lo sorprendente es que Alexandre no utilizó ningún spray sino un simple trapo. Los túneles están tan tiznados por la contaminación que las paredes han tornado negras, completamente opacas. Durante más de dos semanas fue limpiando meticulosamente las paredes de la vía subterránea, haciendo aflorar una catacumba repleta de cráneos (más de 3.500!). Su trabajo no fue sencillo, pues la policía urbana repetidas veces intentó impedir su ejecución. Sólo cuando Alexandre les demostraba que no estaba pintando, sino simplemente limpiando la pared, tenían que dejarlo en paz. Al final el graffiti fue tomando notoriedad y el Ayuntamiento quiso poner punto y final a la polémica utilizando sus mismas armas: limpió con agua a presión  el túnel por completo y, como medida de prevención, repitieron la misma operación con las demás vías subterráneas de la ciudad. Sorprendentemente, en un breve espacio de tiempo volvieron a ponerse negras. No os perdáis el video que filmó y que titula “ossario”:


Según palabras de Alexandre, pintó un muro abarrotado de huesos “porque quería traer una catacumba del futuro cercano al presente y mostrar que la tragedia de la polución es un problema que sucede aquí y ahora. Buscaba recordar a la gente las cosas que intenta olvidar”. ¿Pensáis que si el autor hubiera adornado pared con un manto de flores el Ayuntamiento se hubiera apresurado tanto a limpiarla? Posiblemente no. La muerte es un hecho cotidiano, habitual e inevitable, pero nuestra sociedad quiere vivir de espaldas a ella. Parece que cada uno es el culpable de su propio deceso: “fumaba mucho… no practicaba deporte… comía demasiado… hacía esto o lo otro…” Y sin embargo, vemos a cada momento que todo nace para morir: al día le sucede la noche, la flor se marchita en el vaso y nuestros recuerdos quedan silenciados en una foto. No quiero decir que haya que celebrar la muerte, pero negarla tampoco es muy sabio.

De este trabajo de Alexandre me cautiva especialmente el proceso. No añade nada a la superficie, sólo sustrae parte de lo que ya hay. Como el escultor que elimina la piedra sobrante, él quita el hollín de más para hablar a través de la pared. La imagen final del vídeo en que el negro líquido de la limpieza definitiva corre hacia el desagüe está cargado de sutileza y simbolismo: todo es efímero, incluso el hablar de ello (también puede interpretarse como: “todo este veneno está entrando en nuestros pulmones”; ese es el mensaje de Alexandre).









- Semana 8 - Maike


- Semana 8 - Llorenç


- Semana 8 - Teresa M.


- Semana 8 - Pep


- Semana 8 - Coloma C.


- Semana 8 - Teresa A.


- Semana 8 - Gloria


- Semana 8 - Mercè P.


- Semana 8 - Coloma M.


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- Semana 8 - Mercedes L.


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- Semana 8 - Nicolás


- Semana 8 - Mercè A.


- Semana 8 - Sebastiana


- Semana 8 - Julia


- Semana 8 - Amalia


viernes, 18 de octubre de 2013

+ Lágrimas sobre la luz +

Para los que todavía no habéis ido al Casal Solleric de Palma a ver la Colección de dibujos de DKV os voy a dar otra razón para visitar este lugar. Situado en el patio principal desde donde arrancan las elegantes escaleras que conducen a la planta noble podéis contemplar una instalación del artista mallorquín de proyección internacional Pep Llambías (Alaró 1954), que se inauguró el día de la Nit de l’Art.

La intervención se titula “El peso de la luz” y es una obra especialmente concebida para este espacio. El autor toma como elemento significativo una simple y convencional bombilla, recubierta por una capa de escayola blanca. A estos artefactos, cerca de doscientos,  Llambías ha adherido innumerables fragmentos de su repertorio iconográfico: caracoles, corazones, ovejas… La mayoría de estas blancas estructuras están suspendidas de un hilo frente una fuente de luz, sobre la que gravitan y giran. Otras cayeron sobre ella y se hicieron añicos. La blancura de la base se multiplica en innumerables puntos luminosos que se destacan sobre la penumbra. Es una obra llena de sensibilidad y poesía.

Desde lejos, subiendo por la rampa que da acceso, uno tiene la sensación que está presenciando la lluvia precipitándose en el vacío. Pero al acercarse a la instalación y descubrir que cada gota tiene adherido un símbolo, un detalle, la percepción cambia. ¿Qué son estas gotas de luz que llevan un viajero, un intruso? ¿Son más bien lágrimas que contienen nuestros deseos, nuestras ilusiones, nuestros desengaños?





- Semana 7 - Andreu


- Semana 7 - Amalia


- Semana 7 - Bel P.


- Semana 7 - Carme


- Semana 7 - Claudia


- Semana 7 - Coloma C.


- Semana 7 - Elisabet


- Semana 7 - Isabel


- Semana 7 - Joana C.


- Semana 7 - Llorenç


- Semana 7 - Maike


- Semana 7 - Sebastiana


- Semana 7 - Sonia


viernes, 11 de octubre de 2013

+ Saliendo del muro +

En este mundo acelerado donde la juventud, según las estadísticas, cambia de móvil cada seis meses, la novedad vende. Y el mundo del arte está contagiado de este frenesí. Los artistas buscan crear marca, que se les conozca fácilmente y destacar innovando. Hacer algo singular, que no se haya creado todavía, es un billete hacia el éxito. Pero si la propuesta busca sólo llamar la atención, hacerse oír dentro del ruido general gritando más fuerte, carece de contenido y su interés caerá rápidamente. En cambio, cuando la obra de arte nace del trabajo y la maduración, de la investigación seria y la búsqueda de nuevas formas de expresarse, creará escuela.

El artista Matteo Pugliese nació en Milán en el 69 (somos de la misma quinta), donde cursó sus estudios, graduándose en literatura moderna. Desde joven se dedicó al dibujo y la escultura de forma autodidacta. En 2001 inauguró su primera exposición, empujado por sus amigos, que le insistían en que hiciera público su trabajo. Después, su obra se ha expuesto en galerías de Italia y de medio mundo.

Pugliese esculpe cuerpos humanos. Este tema cayó en desgracia después de la vanguardia. Tal vez porque lo moderno asimilaba el modelo a la odiada Academia y sus artificios. En el nuevo arte, si aparecía la figura humana estaba deformada, alargada, estrujada, perforada o simplificada. El cuerpo del hombre y la mujer, real o idealizado, se quedó abandonado en los museos de Arqueología y la línea geométrica se apoderó de los volúmenes.

Él, en cambio, rescata el cuerpo físico, pero no a la usanza tradicional. Sus figuras, en vez de reposar sobre un pedestal, salen del muro a modo de superhéroes de película (la complexión física de las estatuas también sugiere el mundo del cómic). Más que sus obras presentadas fríamente en una galería, me sorprenden cuando están integradas en un ambiente. Si miráis su web (matteopugliese.com), en el dossier de prensa podéis ver las esculturas instaladas en casas, salones, terrazas. En estos lugares la figura entabla un diálogo con los objetos que la rodean. Es cierto que estos bronces nos provocan inquietud y desasosiego. Los críticos hablan del “hombre cautivo del muro” cuando se refieren a él.

Pugliese ha conseguido realizar un trabajo personal, propio e inconfundible. Su propuesta es innovadora y llamativa, pero no está vacía. Los bronces están elegantemente trabajados: las expresiones de la cara, las posturas, los acabados de la piel, todo está espléndidamente conseguido y permite que sus figuras rebosen significado y simbolismo.

Sorprende que junto a esta serie de piezas el artista muestre en su web otra obra a la que se dedica paralelamente. Se trata de una extensa colección de samurais y otros guerreros de fantasía hechos de terracota, de lo más kitsch. Son como personajes de videojuego, estrafalarios y aparatosos. Comprendo su pasión por estas figuritas de juguete pero no la comparto. Sin embargo, suponen un eslabón necesario en la evolución artística de Pugliese y seguramente un divertimento frente al dramatismo del otro trabajo. Al final, los juicios de valor sobre lo que verdaderamente es bueno son tan relativos como lo son los intereses de cada uno. Preguntad al joven de la casa, tan aficionado a los juegos de ordenador, cuál de las dos series le interesa más…







- Semana 6 - Carme


- Semana 6 - Julia


- Semana 6 - Mª Antònia G.


- Semana 6 - Maike


- Semana 6 - Coloma C.